Nuestro personaje del Mes es...: Fernando de Trástamara, rey de Castilla y Aragón
Datos del rey
Allá por 1516 fallece después de 37 años de reinado el último rey independiente de Aragón, Valencia, Sicilia, Córcega y Cerdeña, Nápoles, duque de Atenas y Neopatria, conde de Rosellón, Cerdaña y Barcelona, Fernando II, V de Castilla, por su matrimonio con Isabel I de Castilla.
No hablamos de él sólo porque sea su bicentenario, sino por lo significó para la Corona de Aragón.
Si quieren leer sobre Fernando el Católico (1479-1516) como rey de Castilla o como monarca de la proto Monarquía Hispánica hay numerosa bibliografía que se puede consultar:
- Las Indias en el pensamiento de Fernando el Católico, José María Pérez Collados (1992).
- El Antiguo Régimen: los reyes católicos y los Austrias, Antonio Domínguez Ortiz (1988).
- Los Reyes Católicos: 1474-1516, Hillgarth, Batllori y Pigrau (1984).
- La España de los Reyes Católicos (1474-1516), Suárez Fernández, Fernández Álvarez y Menéndez Pidal (1978), todo un clásio...
Por citar algunas
Fernando, rex Dei gratia Aragonum
Pero hoy hablaremos de Fernando como rey de la pars orientalis del Imperio, o sea, de la Corona de Aragón.
Fernando recibió de su tío, Alfonso V (1416-1458) y de su padre, Juan II (1458-1479), un fracasado intento de crear un Estado Moderno (centralizado), si bien Alfonso lo consiguió durante la conquista de Nápoles (1432-1443) y desde su gobierno en Italia (1443-1458), a Juan II se le vino el mundo encima con la Guerra Civil Catalana (1462-1472), muy relacionada con las políticas previas de Alfonso V.
Perdió además Nápoles, que fue gobernado por una rama lateral de la dinastía de Aragón, hasta 1506. Con lo cual la política del monarca hacia sus reinos fue:
La pacificación de los mismos con la insaculación como sistema electoral en las ciudades para reducir la conflictividad entre grupos urbanos.
Pacificación de Aragón mediante la Sentencia Arbitral de Celada, donde reconocía el derecho de los señores, amos de la situación en el reino de Aragón, y por contra, la Sentencia Arbitral de Guadalupe para Cataluña, donde liberaba a la mano de obra del campo (eliminaba la adscripción a la tierra). Posiblemente o fueran grupos más fuertes o podían contar con la burguesía catalana o simplemente como elemento para dinamizar la economía del Principado.
La desconcentración del poder, un proceso que ya había comenzado Alfonso V, mediante el establecimiento de virreyes de forma definitiva en sus reinos, el establecimiento de las Audiencias como organismo de Justicia y control de los virreyes.
Mayor control sobre los impuestos, algo que también había preparado Alfonso V, ya que la nueva posición de los reinos resultó periférica respecto a Castilla, lo importante era recaudar dineros para la política internacional de los monarcas.
Reconquista de los territorios abandonados por Alfonso V, o sea, reconquista del Reino de Nápoles, que sería posteriormente administrado por un nuevo sistema de gobierno, los consejos. Se establecerían en el reino de Castilla, Consejo de Indias, Consejo de Aragón, Consejo de Italia, Consejo de Flandes.
Por tanto, vemos que la política de Fernando hacia sus territorios fue de organizarlas dentro del entramado feudal de la primera monarquía moderna. Y funcionó hasta el agotamiento que se hiciera patente con las campañas de Carlos I y Felipe II en Europa, pero especialmente con la derrota sufrida en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), la derrota contra Francia (1635-1659), las revueltas italianas y catalana (1640) y la pérdida de Portugal (1640-1660).
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